El hosting es un servicio proporcionado por empresas tecnológicas que se encargan de almacenar la información asociada a los dominios web. La palabra “hosting” se traduce literalmente como “alojamiento”, lo que lo convierte en el lugar donde “reside” un sitio web.
La función principal de un hosting es brindar espacio de almacenamiento a sus clientes, ajustándose a las necesidades de cada página web, ya sea que requiera un espacio pequeño o muy amplio.
Existen varios tipos de hosting creados para adaptarse a las distintas exigencias de los usuarios.
Un servicio de hosting debe además brindar los recaudos necesarios para garantizar la seguridad de la información. Lamentablemente los ataque en webs y servidores son muy frecuentes. Por eso tomar medidas como actualizaciones regulares, backups y servicio técnico son elementales.
¿Podemos almacenar la información de una web en una computadora personal? Claro que si, de hecho en la clase anterior pudimos verlo plasmado cuando instalamos wordpress de forma local. Ahora bien ¿Es esta una práctica recomendable? Las computadoras comunes suelen tener un espacio de almacenamiento sumamente reducido para ser usadas como servidor, sin mencionar que no cuentan con el ancho de banda necesario para manejar un alto tráfico de visitantes, lo que podría ocasionar caídas del sitio y por lo tanto una mala experiencia de usuario.
Los servicios de hosting están diseñados específicamente para optimizar el rendimiento en la carga y descarga de datos, lo que garantiza que los usuarios tengan una experiencia de navegación más fluida y rápida en tu sitio, evitando tiempos de espera prolongados al acceder a tus contenidos.
Elegir un buen plan de hosting es un paso fundamental para un sitio web exitoso. No importa que tan buenos desarrolladores seamos, ni todos los recaudos que tengamos al momento de optimizar los recursos, si el servicio de hosting no está a la altura, nuestro sitio no va a funcionar correctamente. Aquí te dejamos una serie de cosas a tener en cuenta: